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Los rosacruces entre nosotros
A lo largo de este artículo, vamos a aproximarnos a la realidad de los grupos rosacruces, entidades que, presentándose algunas de ellas como cristianas, actúan de forma discreta, pero constante, en casi todo el mundo; también en España. Así, veremos los orígenes históricos y culturales de tales órdenes y sus grupos primigenios. Posteriormente analizaremos la realidad de las principales organizaciones rosacruces, de carácter internacional, que en la actualidad trabajan entre nosotros. Después, nos asomaremos a su realidad en España. Y, por último, analizaremos su naturaleza, sus relaciones con la masonería y la posición de la Iglesia católica ante este fenómeno.
La fascinación de Egipto.
Egipto tiene la capacidad de fascinar a personas de todas las condiciones, culturas y épocas. El contacto con sus desiertos, su río Nilo, sus bulliciosas gentes, los monumentos admirables y asombrosos de su época faraónica, facilitan la ensoñación y el libre vuelo de la imaginación.
Así, muchos de los oficiales que acompañaron a Bonaparte en su célebre expedición a Egipto (fracaso militar y político, pero que abrió ese país a historiadores, viajeros y geógrafos) se afiliaron a su regreso a logias masónicas de rito oriental o "egipcio". Y esa capacidad de ensoñación, que ha llevado a muchos hombres a preguntarse si, acaso, las arenas de Egipto encierran presuntos secretos trascendentales para el destino de la humanidad, sigue estando en el origen de organizaciones de todo tipo, muchas de ellas de carácter esotérico. Una de éstas es la Antigua y Mística Orden Rosa Cruz (AMORC en lo sucesivo), siendo muy conocida en todo el mundo por su constante presencia publicitaria en los medios de comunicación. A través de llamativos anuncios, AMORC ofrece cursos por correspondencia asegurando "el sentido de la vida", junto a múltiples técnicas de "auto ayuda", fenómeno de moda en las últimas décadas, en buena medida, de la mano de la llamada "New Age". Según AMORC, los primeros rosacruces habrían visto la luz en el Egipto faraónico, siendo las cámaras "secretas" de sus grandes pirámides los primeros espacios empleados para sus ritos e iniciaciones en tiempos del faraón Akhenatón.
Pero AMORC no surge de la nada. Junto a la masonería, es una de las asociaciones esotéricas más numerosas (sus miembros, afirman, son varios millones en torno a seis— de personas en todo el mundo, aunque algunos autores cuestionan seriamente tales datos), entroncando la primera dentro de la corriente esotérica "rosacruz": conjunto de entidades semisecretas que, negando tener un carácter religioso, arrancan oscuramente en el siglo XVII, para llegar hoy día divididas en múltiples obediencias, en mutua competencia y desautorizadas las unas por las otras, prometiendo un desarrollo de las potencialidades de la persona, pregonando un mensaje de espiritualismo y de fomento de la paz mundial.
Varias de estas organizaciones (AMORC, Orden Rosacruz, Lectorium Rosicrucianum, etc.) se encuentran presentes en España, si bien su incidencia no llega a tener el calado que han conseguido en algunos países hermanos del otro lado del Atlántico.
No pretendemos discernir, evidentemente, qué organización concreta es la auténtica depositaria de la "legitimidad" o del "tesoro" rosacruz", si es que existen realmente. Se trata de una polémica que no nos interesa. Pero sí que creemos que, para poder adentrarnos entre esta auténtica "maraña" de siglas y nombres que en ocasiones se sirven del adjetivo de "cristiano", y que están presentes entre nosotros, es necesario tener una visión de conjunto y unos juicios claros.
Origen de los Rosacruces.
Algunos autores, caso de Massimo Introvigne, relacionan, de alguna manera, los fenómenos de la masonería y de los rosacruces.
La "rosacruz" primigenia afirman sus partidarios— sería en realidad una sociedad secreta integrada por 12 miembros exclusivamente, fundada por un personaje legendario, Christian Rosenkreutz, cuyo tesoro iniciático consistiría en la que denominan sabiduría eterna. Esta orden rosacruz cultivaría diversas ciencias herméticas (especialmente la alquimia) y la gnosis divina, velando, además, por el desarrollo moral de la humanidad, desde la sombra, con absoluta discreción.
Regida en sus manifestaciones públicas por ciclos temporales precisos, se reactivaría cada 108 años; permaneciendo de forma operativa y, posteriormente inactiva, en periodos de idéntica duración temporal. Es en 1614 cuando empezó a revelarse mediante varios escritos. Posteriormente será en el siglo XIX cuando se manifestaría de nuevo a través de una serie de grupos en Francia fundamentalmente, haciéndolo, por última vez, a primeros del siglo XX en lo que respecta al actual ciclo.
El fenómeno arranca de la aparición de tres textos a partir de 1614: "Fama fraternitatis", "Confessio" y "Las bodas alquímicas de Christian Rosenkreutz". Tales textos habrían sido escritos por el pastor protestante Johan Valentín Andreae, como un entretenimiento, pretendiendo con ello, y según algunos autores, obtener cierta unidad de los protestantes frente al Papado y los Habsburgo.
En "Fama fraternitatis" se describe la situación europea de entonces, proponiendo una ciencia espiritual universal para superar sus divisiones.
"Confessio" auguraba la próxima revelación del verdadero sentido de la Biblia.
"Las bodas alquímicas de Christian Rosenkreutz" es el título de la narración esotérica del viaje "iniciático" del protagonista (cuyo nombre podría traducirse por Cristiano Rosacruz), mezcla de varios géneros: mística, alquimia, etc.
Tuvieron un notable éxito, especialmente en la Alemania de entonces, generando varios cientos de escritos, como respuesta, del más variado signo. Es en 1623, cuando la "manía" rosacruz alcanza Francia, al aparecer en algunas calles de París un cartel, con el escrito "Fama fraternitatis", que comenzaba con una de las frases que mayor fortuna ha tenido en el mundo del ocultismo: "Nosotros, Diputados del Colegio principal de los Hermanos Rosa Cruz por la gracia del Altísimo&".
A juicio de Jean-Pierre Bayard, "Andreae, presumiblemente el autor de estos escritos, fiel reflejo de su época, no es más que el portavoz de una sociedad secreta, oculta, cuya autoridad central, de pronto, hubiera querido revelarse. Este grupo no se refiere a antiguos misterios, a antiguos rituales, pero se sitúa en el naciente siglo XVII, apoyándose sobre unos símbolos que son eternos. El fenómeno de la Rosacruz está unido a aquella otra corriente de pensamiento ilustrado por Paracelso, Flud o Maïer".
Por supuesto, no existe ningún indicio histórico, ningún documento creíble, de la existencia real de tal sociedad secreta; tampoco de Christian Rosenkreutz (así lo asegura, entre otros, el mayor especialista español en sectas, Manuel Guerra, en su Diccionario Enciclopédico publicado por la B.A.C.). Pero, pese a ello, generó un movimiento que en la actualidad, todavía, se traduce en múltiples sociedades semisecretas que cultivan el ocultismo, con varios millones de adeptos por todo el mundo.
Según algunos autores rosacruces (Spencer Lewis, por ejemplo), la propia masonería sería un brazo desgajado del tronco común de la rosacruz. Los masones no aceptan que se sitúe el origen de su orden en este contexto y entorno, pero es indudable que las influencias de ambos movimientos han sido mutuas y recíprocas: la organización en grados, diversos ritos, buena parte de su patrimonio doctrinal, el secreto, etc. No en vano, masonería y movimiento rosacruz surgen en el mismo ámbito cultural y filosófico de la modernidad, con el "humus" del pluralismo como fenómeno distintivo, la reforma protestante, el iluminismo y el florecimiento posterior de sectas de todo tipo, muchas de ellas generadas en los aledaños, o en el mismo núcleo, de ambas organizaciones. Además, es posible rastrear la existencia de ideas gnósticas y herméticas que, desde los primeros siglos del cristianismo, afloran periódicamente, enlazando, finalmente, con las recogidas en esos primeros escritos rosacruces y en ámbitos de la masonería (afirmación, ésta última, del experto Manuel Guerra).
Todo ello propició un ambiente cultural del que surgirían, ya en el siglo XVIII, las primeras organizaciones rosacruces.
La edad de oro de los rosacruces.
Entre los primeros adeptos de la rosacruz encontramos, siempre según los autores de estas convicciones, a personajes como el ya mencionado Johan Valentín Andreae, Paracelso, Barnaud, Heinrich Khunrath, Francis Bacon, Michel Maïer, Robert Fludd, Comenius, René Descartes, Spinoza, Thomas Vaughan&
Es en el siglo XVIII cuando eclosiona este movimiento en varios grupos, entrelazados a un racimo de nombres de singular prestigio en los ambientes esotéricos, especialmente en Alemania y en Francia: La Rosacruz de Oro (fundada en Alemania hacia 1704 por algunos masones que establecieron 9 grados), la del Antiguo Sistema, los Iluminados de Baviera, Martinès de Pasqually, Louis Claude de Saint Martin, Cagliostro, el Conde de Saint — Germain& Desde entonces, otra corriente de entidades ocultistas semisecretas, el muy fraccionado "martinismo", aparece vinculado, de una u otra manera, a las organizaciones rosacruces.
En el siglo XIX serán otras entidades y personalidades las que recogerán la antorcha rosacruz, agrupadas, en uno u otro momento, en torno a diversas organizaciones entre las que destacaron las siguientes:
Ordre Kabalistique de la Rose Croix.
Fundada en París en 1888 por Marie Victor Stanislas de Guaita. Su objetivo era el estudio de los "Clásicos" del ocultismo. Desaparecida a la muerte de sus impulsores, sigue siendo una referencia ideal para rosacruces de todo el mundo, alguno de los cuáles, todavía y por internet, buscan la manera de contactar con la misma, pues todavía seguiría operativa.
Ordre Catholique Rosecroix du Temple et du Grial.
Grupo fundado por Joseph Péladan, al marcharse de la anterior. Desaparece con la muerte de su fundador en 1918.
Sociedad Rosacruciana en Inglaterra (S.R.I.A.).
Fundada en 1867 por Robert Wentworth Little, agrupa exclusivamente a masones con grado de "maestro". Su iniciación se reparte en 9 grados, siendo muy notable la influencia de la Rosacruz de Oro. Más tarde se establece en Estados Unidos y Canadá con el nombre de Sociedad Rosacruciana en América.
Fraternitas Rosae Crucis.
Fundada en 1868 por Pascal Beverly Randolph (procedente de la S.R.I.A.), autor de una interpretación "ocultista" y "mágica" de la sexualidad.
Otras relevantes personalidades del esoterismo vinculadas, en mayor o menor medida a estos grupos rosacruces de finales del siglo XIX fueron: Papus, Philippe de Lyon, Phaneg, Marc Haven, Paul Sedir, Paul Adanm, Eliphas Lévi&
Y un inquietante personaje, que vivió a caballo entre los siglos XIX y XX y que algunos autores también vinculan de alguna manera con el "universo" rosacruz a través de la célebre sociedad secreta ocultista "Golden Dawn" (Alba Dorada, fundada en 1887 desde la S.R.I.A.), fue Aleister Crowley: uno de los ocultistas que ha levantado mayores controversias dentro y fuera de los medios esotéricos.
Ya en el siglo XX, las anteriores personalidades ocultistas, junto a diversas corrientes esotéricas (la Sociedad Teosófica, la Antroposofía, las órdenes Templaristas como Ordo Templis Orientis, los grupos gnósticos, la masonería de rito oriental o egipcio, etc.), están en el origen inmediato de las actuales órdenes rosacruces operativas en España y en el resto del mundo.
Organizaciones rosacruces actuales y sus principales inspiradores.
Las organizaciones que afirman poseer una identidad rosacruz, ya arrogándose la exclusiva legitimidad y continuidad de la presunta y primigenia orden rosacruz, ya como objeto de su estudio esotérico y trabajo ocultista, son numerorísimas. Se trata de un conjunto de entidades muy fragmentadas, generalmente nacidas, e impulsadas, al calor de alguna figura con cierto carisma personal que se siente capacitado para iniciar un nuevo "ciclo" de la orden, generando una "escuela", en cualquier caso.
Veremos, a continuación, las más relevantes, lo que nos puede proporcionar otra aproximación a su naturaleza última.
Orden Rosacruz.
La única orden rosacruz nacida en España, lo hizo el día 6 de enero de 1988, impulsada por un antiguo alto cargo de AMORC, quien sigue siendo su Imperator.
Su implantación se ha producido, fundamentalmente, en España, radicando la Sede Soberana mundial— de la orden en la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria. Se ha iniciado una discreta expansión por otros países, especialmente en Hispanoamérica.
Sus páginas web son de las mejores, de temática rosacruz, que se encuentran en Internet, realizando, además, algunas pequeñas campañas publicitarias en diversos medios de comunicación.
Un análisis de su web refleja, aparentemente, un notable paralelismo con la entidad rosacruz más extendida en la actualidad, AMORC: temáticas, método de enseñanza, organización, etc. Pero carece de la abundante simbología egipcia que caracteriza a la mencionada rosacruz americana.
Ese paralelismo se evidencia, también, cuando su fundador y actual Imperator, Ángel Martín Velayos, narra su versión de los hechos determinantes de la reactivación de la orden. Habría sido a través de su contacto con un anciano en Barcelona, nieto del último miembro de una logia rosacruz existente en esa ciudad y que se extinguió en 1880. Cambian las fechas, las ciudades y los nombres, pero las similitudes con la narración de Harvey Spencer Lewis, fundador de AMORC, son evidentes. Si todo se rige por ciclos, aseguran, también la rosacruz actúa en función de tales ritmos: ciclos de 108 años. Ello supone una cierta contradicción: si la rosacruz se reactiva cada 108 años, veíamos, ¿cómo es posible la existencia de dos órdenes auténticas simultaneas temporalmente? Así como AMORC se arroga le exclusiva legitimidad de origen rosacruz de una forma explícita, la entidad que nos ocupa se remite a la historia de la orden de forma más genérica, considerándose heredera de una tradición esotérica concreta. Y por ello, no sienten obligados a dar más explicaciones al respecto.
Los miembros de Orden Rosacruz, afirman, "se dedican al estudio y a la aplicación de las Leyes de la Naturaleza en su forma más elevada", siendo la paz y el éxito internos los objetivos de su trabajo. Ese cambio sería el contenido de lo que denominan "alquimia espiritual rosacruz".
Al igual que otras entidades rosacruces, insisten en afirmar que no se trata de una religión, que no entra en política y que no tiene ánimo de lucro.
Sus enseñanzas se imparten por correspondencia, con una media de 4 lecciones mensuales de carácter práctico, con la pretensión, tanto en el plano físico como en el mental, de desarrollar las enormes potencialidades del hombre, entendido como un micro-cosmos concreción y reflejo del macro-cosmos.
Al igual que la mayoría de las entidades de su género, también Orden Rosacruz asegura poder mejorar la memoria, corregir enfermedades, etc.
En las ciudades donde existen logias, los rosacruces de esta obediencia pueden participar en las ceremonias iniciáticas propias de un proceso formativo "tradicional", dividido en grados, y a los que corresponden, en cada caso, determinados mandiles e insignias.
Disponen de una publicación (Triángulo de luz) que puede adquirirse solicitándolo por Internet o en la Sede Soberana de Las Palmas.
El libro titulado "Mis maestros", escrito por el Imperator de esta obediencia rosacruz, es otro de los textos que pueden adquirirse.
Los contenidos de sus web son muy claros, discretos, menos pretenciosos que los de otras obediencias y sutilmente ambiguos. Algunos de sus términos (logias, Gran Arquitecto del Universo) y el empleo de determinados símbolos (insignias y mandiles), recuerdan inevitablemente a la masonería.
Antigua y Mística Orden de la Rosa Cruz (AMORC).
Se trata de la entidad rosacruz que, con mayor extensión en todo el mundo, reclama, además, ser la única y legítima heredera de los auténticos rosacruces.
AMORC afirma tener sus orígenes nada menos que en el Egipto de Tutmosis III. A partir de ese pasado mítico, diversas personalidades y organizaciones esotéricas jalonarían la historia de esta orden que afirma ser la legítima sucesora de los rosacruces históricos (los llamados ocultos maestros desconocidos): la Gran Fraternidad Blanca, Akhenaton, Tales de Mileto, Plotino, Pitágoras, Carlomagno, Arnaud&
Christian Rosenkreutz, el protagonista de los primeros textos rosacruces, no sería un personaje real para esta orden, sino que formaría parte de la campaña previa preparatoria a su resurgir temporal en aquel momento histórico concreto.
Otros rosacruces ilustres habrían sido, según las publicaciones oficiales de AMORC: Leonardo da Vinci, Paracelso, Bacon, Descartes, Spinoza, Newton, Cagliostro&
Al norteamericano Harvey Spencer Lewis corresponde el mérito de haber levantado esta multinacional del esoterismo, presente en todos los continentes y con varios millones de miembros, según afirman. Trasladado a Francia en 1909, habría recibido el encargo de revitalizar la orden e iniciar un nuevo periodo de 108 años de actividad. La veracidad de tales hechos es cuestionada en numerosos foros esotéricos; existiendo algunas extensas páginas en internet dedicadas exclusivamente a demostrar, de forma muy detallada, las presuntas incongruencias y contradicciones históricas y narrativas de Spencer.
Se define a sí misma como una "organización filosófica, iniciática y tradicional, que perpetúa el conocimiento que los Iniciados le transmitieron a través de los siglos. En términos generales, su objetivo consiste en familiarizar al hombre con las leyes cósmicas y enseñarle a vivir en armonía con ellas, permitiéndole conocer la felicidad y adquirir la Maestría de la Vida, tanto en el plano material como en el espiritual. Sin ser ni una secta ni una religión, ni tampoco un movimiento socio-político, la Orden reúne a hombres y mujeres pertenecientes a todos los credos religiosos y a todas las categorías sociales".
Como "Escuela de misterios", entienden éstos como una gnosis, como una sabiduría secreta.
Afirman ser independientes de la masonería, aunque reconocen que, en el siglo XVIII, su relación era muy estrecha, siendo en la actualidad muchas las personas que gozan de esa doble condición simultáneamente. Debe precisarse que existe una relación más estrecha entre AMORC y la masonería de rito egipcio, sobre todo en sus orígenes, además de la meramente simbólica, obteniendo su fundador los grados más elevados de diversas obediencias de ese particular rito, minoritario en la masonería actual y que llegó a alcanzar una notable extensión, en países como España, a finales del siglo XIX.
AMORC niega ser una religión, ya lo hemos visto párrafos arriba. También niega que imponga creencias de ningún tipo, pues se trataría de una "Escuela de Iniciados consagrados a perpetuar el Conocimiento a través de los tiempos. Se trata de un sendero de Conocimiento basado en la búsqueda individual y un sincero deseo de superación".
Al igual que la masonería, los rosacruces tienen prohibido el proselitismo religioso en el interior de la orden.
Moisés, Buda, Jesús, Mahoma, todos ellos —y otros-- habrían sido los grandes Maestros de la humanidad, pero para AMORC "el más grande de los Maestros no es otro que el propio Maestro Interior, que es la encarnación de Dios en cada ser humano".
Para estos rosacruces es fundamental la idea de la reencarnación, aunque afirman ya lo veíamos antes— no imponen esta creencia a quiénes entran en la orden. Pero, en lógica consecuencia, para poder avanzar en la adquisición de la verdadera sabiduría, hay que despojarse de las viejas creencias&
El crecimiento personal se realizaría tanto a nivel espiritual como a nivel material, de ahí la importancia del aprendizaje de algunas disciplinas que ayudarían a obtener éxito en diversas facetas de la vida. En este sentido, aunque con una importancia secundaria, en el interior de la orden también se estudian los poderes psíquicos: telepatía, radiestesia, proyección psíquica, etc. Con todo, consideran más importante el "despertar de las virtudes del alma". Así, la alquimia que practican estos modernos rosacruces sería la espiritual: la transmutación de cada defecto en la virtud opuesta.
Conciben la historia de forma cíclica, con una duración de 2160 años para cada ciclo. La época anterior era la de Piscis, siendo el "maestro Jesús" quién la habría abierto: así, estos ilustrados rosacruces nos recuerdan que el primero de los signos distintivos de los cristianos fue el pez y no la cruz.
En lo que se refiere a la organización, niegan que se trate de una organización secreta, sino "discreta". Está dirigida por un Consejo Supremo integrado por los Grandes Maestros de todas las jurisdicciones territoriales. El Imperator es el presidente del citado Consejo y su máximo líder y autoridad. En la actualidad se trata de un cargo electo periódicamente.
Es en las logias locales donde se perpetúa el aspecto oral de la tradición rosacruz, a través de las ceremonias de iniciación de cada grado.
Ese desarrollo personal se adquiere conforme se progresa en los 9 grados iniciales: después de la fase de preparación existe el grado de postulante, posteriormente, el de neófito (otros tres grados), siendo la fase de Estudios la correspondiente a los iniciados. Superados estos grados, ya "iluminado", deben superarse otros tres grados más.
Los estudiantes reciben 4 monografías mensuales de unas 10 12 páginas. Estudian vestidos con un mandil y en un lugar de su casa reservado para ello y provisto de una decoración muy concreta: un espejo, una cruz, un candelero.
Se agrupan, según su número, en logias, capítulos y pronaos, reuniéndose en templos decorados con motivos egipcios.
Organizan, periódicamente, convenciones nacionales, de las grandes jurisdicciones y, también, de ámbito mundial. Disponen en San José (California) de un complejo arquitectónico integrado por diversos edificios de estética faraónica egipcia: la llamada Universidad Rosacruz.
Para iniciarse en AMORC hay que reunir unas condiciones: ser mayor de edad (los menores precisan de autorización paterna), solicitud por escrito manifestando sus intenciones y pago de las cuotas (generalmente, mensuales). A cada nuevo miembro, desde el primer momento, le es asignado un número a efectos "administrativos".
Otra entidad que cuenta con varios millares de adeptos en todo el mundo, especialmente en Francia, e íntimamente ligada a AMORC, es la llamada Orden Martinista, inspirada en la corriente esotérica denominada martinismo. Desarrollada a partir de las doctrinas de Martínez de Pasqually, está constituida a modo de orden paralela de AMORC y compuesta, en su mayor parte, por rosacruces de la misma. Al no tratarse de una organización netamente rosacruz, no profundizaremos en ella.
Lectorium Rosicrucianum.
Esta entidad afirma sentirse unida a la que denomina "corriente crística", equivalente, a su juicio, a la enseñanza hermética, es decir, la síntesis de la sabiduría original, la suma de todo saber. Invita a descubrir en sí mismo el "átomo chispa de Espíritu", por ellos denominado "Rosa del Corazón", mediante el cual uno puede volverse hacia lo Absoluto. Catarismo, rosacruz y Grial se fundirían en un nuevo impulso cristiano.
La "Corriente Universal de Cristo" se manifiesta afirman— en impulsos de Fuerza de Luz que, a modo de respiración cósmica, desciende a nuestro campo de vida terrestre. Y esa Fuerza de Luz se manifiesta aseguran-- también de forma horizontal a través de grandes enviados: Rama, Khrisna, Hermes, Buda, Pitógoras, Zoroastro, Sócrates, y el más grande de todos: Cristo. Todo ello constituye un conjunto de creencias de incuestionable aroma gnóstico.
La Rosacruz Moderna, tal como también se denominan, es una Escuela de Misterios cuyo objetivo final sería mostrar el camino preciso para que el candidato que lo desee se una directamente con la Fuerza del Amor Universal, contribuyendo con ello a la liberación de toda la humanidad.
Si bien la orden rosacruz se manifiesta en 1614 con la intención de reanimar el valor liberador del primitivo cristianismo, aseguran, es en 1924 cuando el Lectorium se funda en Holanda de la mano de Jan van Rijckenborgh, Z. W. Leene (ambos antiguos miembros de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel, que luego veremos brevemente) y Catharose de Petri.
Cristo sería una fuerza existente desde toda la eternidad, presente en todas partes y en todo tiempo, un ser ilimitado; quien ofreció a todos los hombres la posibilidad de realizar en su propio ser el proceso de transfiguración.
Cristo sería el Espíritu del planeta, de ahí que la vía de la transfiguración se concrete en un camino de actos reales. Si Jesús de Nazaret se transformó en Jesús el Cristo, afirman estos modernos gnósticos, todos podemos despertar a la vida verdadera por la Fuerza de Cristo que actúa en nosotros.
Esta Fraternidad Rosacruz tendría como objetivo vivificar lo que denominan el triple Templo Divino Original, que aportaba a los hombres la Religión Original, Real y Sacerdotal, la Ciencia Original y el Arte Original de la Construcción.
Esta organización, que emplea el término "gnosis" constantemente, manifiesta especial atracción por la herejía medieval cátara, a la que atribuye unos contenidos absolutamente discutibles desde un punto de vista histórico.
Su "trabajo espiritual" pretende ser impersonal. No desarrollan, afirman, ningún culto personal hacia sus fundadores. Un colegio de 12 miembros forma la "Dirección Espiritual Internacional", existiendo varias direcciones nacionales de 6 personas cada una; también en España
El proceso del Lectorium está estructurado en siete escalones. Después de asistir a un curso de orientación, existe la posibilidad de acceder a la condición de simpatizante o alumno, que corresponde al Atrio del Lectorium, es decir, al exterior de la organización.
Para el estudiante, se organizan conferencias y cursos de duración anual.
Los siete niveles corresponden a las siguientes fases:
- Autopercepción del "átomo chispa de Espíritu Original".
- Purificación y renovación hacia el Arquetipo Divino.
- Transmutación interior o renacimiento del alma.
- Fase alquímica de la reconstrucción del Alma Inmortal.
- 6. y 7. Transfiguración, en relación con el "Campo de Radiación de la Rosacruz de Oro", aspecto más interno de la Escuela de Misterios.
Para progresar de un grado a otro se precisa el transcurso del tiempo y la asistencia a las actividades internas organizadas por la entidad.
No consideran relevante la tradición de los ciclos, de actividad o inactividad, de la orden rosacruz, de 108 años, tal como lo afirman otras entidades.
No cultivan el espiritismo, ni la cartomancia, ni las ciencias parapsicológicas, por considerarlas expresiones de la naturaleza; siendo su objetivo, por el contrario, la búsqueda de la naturaleza divina.
Hay que destacar que, para la mayoría de los demás grupos rosacruces, esta entidad no sería tal, siendo sus creencias un compendio particular de las enseñanzas personales de sus fundadores.
Por algunos de sus elementos definitorios, bien podría calificarse de "religión", más que de entidad esotérica. Y de hecho está inscrita en España, legalmente, como entidad religiosa. Sus miembros fallecidos deben ser incinerados. Administran un rito, de aspecto cuasi sacramental, al que denominan "consolamentum", al igual que lo hicieron los herejes cátaros, aunque con un contenido, parece ser, bastante distinto. Además, sus miembros deben seguir unas estrictas normas dietéticas.
Orden Rosacruz El Orden de Melquisedec.
Sin proyección pública conocida en España, dispone de unas vistosas páginas en Internet, de dudoso gusto y de fácil acceso.
Su "doctrina" responde a la elaboración particularísima de su fundador, en la que integra los "mitos" clásicos rosacruces con otras tradiciones ocultistas; reinterpretando según sus convicciones toda personalidad o entidad relevante en el mundo de las sociedades esotéricas. Presenta un conjunto heterogéneo de creencias de base gnóstica, integrando también algunos de los supuestos contenidos de las primitivas religiones precolombinas. Un lenguaje oscuro, unos conceptos cambiantes, aderezan unos textos heterogéneos. Encontramos, por una parte, una presunta explicación de la auténtica historia rosacruz. Por otra, proporciona unos escritos de pretensiones poéticas de inspiración pseudo mística.
Fraternidad Rosacruz (de Max Heindel).
Se denomina también "Asociación internacional de místicos cristianos", considerándose el verdadero cristianismo, entendido, naturalmente, desde una perspectiva esotérica. Según afirman, Cristo habría enseñado su religión a las multitudes en forma de parábolas, pero habría explicado los misterios —el verdadero, e interno, contenido de sus doctrinas-- a sus discípulos. Jesús, según Max Heindel, habría sido un hombre que vivió en muchas encarnaciones; además "El espíritu de Cristo que ha entrado en el cuerpo de Jesús, era un rayo del Cristo cósmico".
Esta entidad no tiene logias, sino templos, radicando en la ciudad californiana de Oceanside el principal de todos ellos, que cuenta doce lados, tantos como signos tiene el zodiaco. Es un dato significativo de la gran importancia que atribuyen a la práctica de la astrología.
Esta fraternidad fue fundada en 1909 por el citado Max Heindel (su nombre verdadero era Carl Louis Grasshoff) en la ciudad norteamericana de Seattle.
Pero el verdadero inspirador de esta fraternidad, habría sido un "Maestro" que se apareció supuestamente— en varias ocasiones a Max Heindel, transmitiéndole el conjunto de conocimientos que, como fiel depositario, se afanó en difundir.
Su principal texto es "Concepto rosacruz del cosmos", habiendo sido editado, en diversas ocasiones, en castellano y otros idiomas.
Su fundador, a diferencia de los de otras órdenes rosacruces, consideró a Christian Rosenkreutz como un personaje real que ya estaba encarnado en época de Jesús y que lo estaría, de nuevo, actualmente. Incluso el Conde de Saint Germain habría sido otra de sus encarnaciones.
Defiende una concepción maniquea explícita, según la cual el bien y el mal, el odio y el amor, se encuentran en permanente lucha.
Autor de una vastísima obra que comprende múltiples temáticas, incurre en numerosas y abultadas contradicciones que sus detractores airean, con profusión, en los medios esotéricos; también en Internet.
Otra diferencia con AMORC y otros grupos rosacruces es el cultivo de la astrología y la quiromancia por sus estudiantes y miembros. Pretenden desarrollar la clarividencia, los viajes astrales, la bilocación y la sanación a distancia durante el sueño.
Por otra parte, la masonería, a su juicio, habría perdido buena parte de su contenido ocultista, por lo que no tendría hoy— el interés que tuvo en su momento.
Practican una dieta vegetariana, propugnando, además, la castidad.
La Fraternidad Rosacruz enseña la relación del hombre con el Gran Arquitecto del Universo y con las doce Jerarquías de Seres Celestiales. El universo estaría dividido en siete planos cósmicos, evolucionando en 7 épocas sucesivas. Tiene, por tanto, una concepción cíclica de la historia y del hombre, por lo que afirman la reencarnación.
Carece de cuerpo iniciático. La iniciación sólo se da en el nivel espiritual, constituyendo una experiencia íntima y personal. Con todo, afirma un sistema de 9 grados de los misterios menores y cuatro Grandes Iniciaciones.
Max Heindel, al final de sus días, llegó a afirmar que su fraternidad no era la verdadera Orden Rosacruz (la cual estaría integrada por sólo 12 selectos y misteriosos miembros que se suceden desde hace siglos, tal como se describe en los primeros escritos del siglo XVII), sino una simple organización terrenal que algún día desaparecerá y dará entonces— origen a algo más grande.
El núcleo central de sus doctrinas se imparten, al igual que por otras obediencias rosacruces, por correspondencia.
Movimiento Gnóstico Universal.
Pese a emplear, en ocasiones, la denominación de rosacruz, cultiva una cosmovisión explícitamente gnóstica, basada exclusivamente en la obra de su fundador Samuel Aun Weor, autor de numerosos y obtusos textos esotéricos de todo tipo. Es una de las entidades esotéricas que mayor actividad pública desarrollan en España.
Orden hermética de la Golden Dawn.
Fundada en 1887 por S.L. Mc-Gregor Mathers, W. Woodman y W. Westcott. Se trata de una entidad "mítica" en el mundo del esoterismo cuya continuidad, en alguna medida, se arrogan numerosas organizaciones y cenáculos. Se alimenta, sólo en parte, de la tradición rosacruz.
Ordo Rosae Rubeae et Aureae Crucis (R.R. et A.C.).
Con una presencia muy limitada, particularmente en América Hispana, formaría el "círculo más interno" de la Golden Dawn.
Orden Rosacruz del Alpha Omega.
Orientada a la práctica de la alquimia y con algunas pequeñas delegaciones en América Hispana.
Stella Matutina.
Pequeña entidad de inspiración rosacruz orientada a la práctica de la alquimia, al igual que la anterior, y con una mínima representación en algunos países de América Hispana.
Fraternitas Rosicruciana Antiqua (Tradición Huiracocha).
Fundada por el ocultista Arnold Krum Heller. Con sede central en Ginebra, cuenta con cierta presencia en América Latina (Chile y Brasil, sobre todo). La entidad se dividió a su muerte en, al menos, dos obediencias. En España se constituyó, según afirma Manuel Guerra en su "Diccionario enciclopédico de las sectas" (2ª edición, BAC), una delegación de una de ellas en Sevilla: "Aula Lucis".
Instituto filosófico hermético.
Fue fundado por Darío Salas Sommer, en 1963, en Santiago de Chile. Este personaje considera a los rosacruces como herederos de extraterrestres, dotados de los conocimientos precisos para ayudar al hombre en su manifestación original y divina. Del ya citado Arnol Krumm Heller proceden buena parte de sus doctrinas. Creen en la reencarnación y en la existencia histórica de Hermes.
Sus enseñanzas se importen en tres grados. A partir de la gran importancia que atribuyen a la mente, practican ejercicios de respiración, meditación, sanación, relajación, ayunos
Cuenta con seguidores organizados en España, realizando algunas actividades públicas en sus locales.
Otras entidades.
Las escisiones, reactivaciones, fusiones, etc., sufridas por este tipo de entidades, hacen difícil el seguimiento de la vida de buena parte de ellas. Internet es un buen medio para hacerlo, pero ciertamente, la constelación de entes rosacruces es confusa y sumamente cambiante.
Organizaciones rosacruces presentes en España.
Orden Rosacruz.
Se trata de la primera y única organización rosacruz nacida en España, en concreto, el día 6 de enero de 1988, impulsada por un antiguo alto dirigente de AMORC, Angel Martín Velayos.
El grueso de su organización se encuentra en España, siendo Las Palmas de Gran Canaria la ciudad en la que radica la Sede Soberana mundial— de la orden, habiendo iniciado una tímida expansión por otros países, especialmente en Hispanoamérica.
Su máximo dirigente es el Imperator Angel Martín Velayos C.R.C. (caballero rosa cruz), autor del texto "Mis maestros", que hemos citado en el artículo anterior.
Cuenta con logias o talleres (según el número de miembros) en las siguientes ciudades y provincias españolas: Las Palmas de Gran Canaria, Valencia, Palma de Mallorca, Madrid, Barcelona, Valencia, Alava, Lérida, Sevilla y Zaragoza.
Realizan modestas campañas publicitarias en prensa, organizando, además, actividades semi públicas en algunas ciudades. La entidad ha sido objeto de atención por parte de algunas publicaciones populares de temas esotéricos y paranormales.
Editan una revista propia, llamada "Triángulo de luz". En la misma se puede observar una clara voluntad de aproximación a la rosacruz histórica, a través del estudio de diversas cuestiones relacionadas con los autores esotéricos "clásicos" como Cagliostro (supuesto fundador de la masonería de rito egipcio), Stanislas de Guaita, Papus, etc.
Sus enseñanzas las imparten, al igual que la mayoría de las entidades rosacruces, por correspondencia.
Está legalizada como asociación cultural.
No parece que su número supere el de unos pocos cientos de adeptos.
Dispone de una red de webs, pertenecientes a sus diversas logias locales, siendo la más interesante y de buena calidad— la elaborada, con carácter oficial e internacional, por sus órganos centrales.
Antigua y Mística Orden Rosa Cruz (AMORC).
La organización rosacruz más numerosa del mundo sufrió, en España, una crisis motivada por la escisión de Angel Martín Velayos y su gente, hecho acaecido en 1988, y que le afectó profundamente, habiendo reestructurado, desde entonces, su presencia. Cuenta con logias en diversas ciudades españoles como Madrid, Barcelona, etc.
La sede central de la logia española radica, actualmente, en Barcelona.
Realizan escasas actividades semipúblicas, como conferencias y exposiciones. Publican periódicamente anuncios en la revista "Más allá" y en otros medios escritos de la "New Age" en España. Cuenta con varias webs poco desarrolladas, transcurriendo muchos meses en sus actualizaciones.
Para ingresar en la orden solo se precisa ser mayor de edad y abonar una cuota de inscripción. Posteriormente, deberá abonar una cuota anual, teniendo ya derecho a recibir por correo, en el propio domicilio, una serie de monografías mensuales (en torno a 4) para su estudio y práctica. Para la superación de cada grado, debe someterse a una ceremonia de iniciación en la logia más próxima a su domicilio.
AMORC afirma tener en España en torno a 2000 seguidores.
Lectorium Rosicrucianum.
También emplea las denominaciones de Escuela Internacional de la Rosacruz de Oro y Fundación Rosacruz.
Presente en España desde 1978, establece su primer centro fijo en Barcelona el 13 de septiembre de 1980, al que suceden otros en Madrid, Sevilla, Málaga, Zaragoza, Valencia, Palma de Mallorca, Tenerife, Ordizia (Guipúzcoa), Gijón, Valladolid, Alicante y Gerona.
Está inscrita como entidad religiosa desde 1983, en el Registro de la Dirección General de Asuntos Religiosos del Ministerio de Justicia español, que, en una publicación oficial, la define de la siguiente manera: "Comunidad religiosa cristiana que se esfuerza por seguir el cristianismo original de una manera adaptada a las posibilidades y necesidades del hombre actual. Pretende que cada uno de sus miembros pueda vivir la experiencia espiritual interior de su unión con el Cuerpo Místico de Cristo, de una manera libre de dogmas, autoridades e intermediarios. La idea rosicruciana del cristianismo es anterior a la reforma de Lutero" (Guía de entidades religiosas de España, 1998, Ministerio de Justicia).
Su sede nacional está situada en la localidad zaragozana de Villamayor, denominada "El Nuevo Mercurio".
Organizan, en sus centros y en espacios públicos, diversas conferencias, anunciadas con numerosos carteles y anuncios, sobre temas directamente relacionados con sus "enseñanzas". También puede accederse a un Curso de orientación de 5 entregas escritas, que pueden recibirse por correo electrónico: la búsqueda del sentido de la vida, lo esencial de la religión, los dos órdenes de la naturaleza, el ser humano como microcosmos y el "santo deseo".
Posteriormente, pueden recibirse las 12 cartas del Curso de introducción, pudiéndose solicitarse la entrada en la organización, a su término, como alumno o simpatizante. Los temas tratados son: verdad e ilusión, el conocimiento de sí mismo, los dos órdenes de naturaleza, el misterio de la vida y la muerte, el cambio fundamental (macrocosmos microcosmos), ¿reencarnación o liberación?, el camino de la endura, el proceso alquímico (la transfiguración), la verdadera oración, el espiritismo y la revolución cósmica, la enseñanza universal (la Biblia) y el candidato y la Escuela espiritual.
Lo que denominan "servicios de Templo" hace referencia a las enseñanzas prácticas de la organización: orígen del hombre, el renacimiento por la transformación de la conciencia, el misterio del Santo Grial, el proceso de la Transfiguración, el "Nuevo Campo de Vida", todo lo relacionado con el proceso de transmutación.
Algunos de sus libros, escritos por sus fundadores, se pueden encontrar a la venta en librerías esotéricas de toda España.
Disponen de varias webs en castellano, sobrias en su presentación, con bastante información y actualizadas periódicamente.
El número de sus miembros en España no parece supere el millar.
Fraternidad Rosacruz de Max Heindel.
Disponen de dos locales conocidos en España: uno en Barcelona y otro en Madrid.
Esta entidad proporciona a sus estudiantes una serie de cursos por correspondencia, por los que sólo acepta donativos. Los primeros cursos son los siguientes: de filosofía rosacruz, de sabiduría bíblica occidental y el curso de astrología.
Instituto Filosófico Hermético.
Esta curiosa organización considera que los rosacruces serían herederos, de alguna manera, de extraterrestres, dotados de la capacidad de liberar al Dios inhabitante de cada hombre.
Cuenta con una discreta presencia en España: en Madrid (donde radica la sede nacional, según su web internacional), Barcelona y algunos adeptos en Burgos (según Manuel Guerra en su "Diccionario enciclopédico de las sectas", 2ª edición, BAC). Organizan algunas conferencias y actividades, de cara al público, a las que han dado publicidad en la mencionada revista "Más allá".
En su web ofertan un curso por correspondencia (mediante entregas mensuales) y varios libros, del género de "autoayuda", escritos por su fundador, el chileno Darío Salas Sommer.
Otras entidades.
Manuel Guerra, en su citado texto, afirma que, hace casi treinta años, existió una entidad denominada "Aula Lucis" (producto de la escisión sufrida en la Fraternitas Rosicruciana Antiqua de Arnold Krumm Heller) en la ciudad española de Sevilla, pasando posteriormente a la disciplina de la Ordo Templis Orientis, OTO, (por lo que debe estudiarse en el contexto de las organizaciones esotéricas de carácter "templarista".
El Movimiento Gnóstico Cristiano Universal (que también emplea otras largas denominaciones) cuenta con una amplia y discreta representación en España. Realizan numerosas conferencias públicas, editando revistas y libros que pueden encontrarse en bastantes librerías esotéricas de toda España. Pero ya hemos indicado que, pese a denominarse "rosacruz", no parece reunir las características que así la definirían. El adjetivo de "cristiano" está presente, tanto en sus convocatorias, como en el mencionado nombre de la entidad, que adopta para algunas de sus actuaciones públicas.
Hay representantes y miembros de otras pequeñas entidades, mencionadas en el anterior artículo, pero ya con carácter aislado, sin alcanzar ni realizar actos de proyección pública alguna.
También existe una mínima presencia de miembros de organizaciones martinistas, sin que realicen actividades públicas. Ya vimos que la principal de tales entidades está íntimamente ligada a AMORC y que, en todo caso no pueden ser calificadas, propiamente, como entidades rosacruces o rosacrucianas.
Naturaleza de las organizaciones rosacruces.
Según Juan Miguel Ganuza en su libro Las sectas nos invaden, los rosacruces serían un nuevo brote de la herejía gnóstica, a la que caracteriza de la siguiente manera: conjunto de doctrinas que, provistas de un ropaje científico y de alta especulación, se atribuía la clave de múltiples secretos humanos y divinos. Se trataba de una "Amalgama religioso científica que tomó del Platonismo la concepción de las ideas, diversos principios ascéticos y un misticismo extraño y exagerado de características panteístas del neopitagorismo y neoplatonismo, las concepciones cosmogónicas de la India y Egipto junto con un cúmulo de ideas religiosas, y todo ello mezclado con ideas cristianas, como la Redención".
Así, el gnóstico Carcoprates tenía algunas teorías coincidentes, en diversos sentidos, con las obediencias rosacruces. Carcoprates afirmaba que Jesús era hijo de José, naciendo como un hombre más. Por la resurrección se libera de su existencia anterior a través de un singular proceso de metempsicosis, triunfa de la muerte y del mundo y recobra al Padre. Este fenómeno puede repetirse en muchos mortales.
En el Diccionario de las Religiones, dirigido por el Cardenal Paul Poupard (Herder, Barcelona, 1987), se afirma que la rosacurz: "es menos una secta religiosa que un sincretismo de origen gnóstico y alquímico, de tipo iniciático, que propone una síntesis del conocimiento de la naturaleza, del secreto de las fuerzas cósmicas, del misterio del tiempo y del espacio, o de los poderes místicos de las religiones o sabidurías de Egipto, Babilonia, de Grecia y de Roma". Según este texto, para los rosacruces, las enseñanzas de Jesús estaban dirigidas sólo a una minoría, lo que las Iglesias ocultaron, siendo ese pequeño número su único depositario. La tierra sería una "gran escuela" a la que el hombre retorna a través de la reencarnación. El saber se transmitiría de manera secreta y privada, siguiendo la tradición de los grandes iniciados. La astrología, la alquimia y otras disciplinas esotéricas serían muy importantes, formando buena parte de las enseñanzas rosacruces.
En todas las obediencias rosacruces encontramos ya lo hemos visto en el primero de los artículos dedicados a estas entidades— una serie de elementos doctrinales y estructurales comunes:
- Un conjunto de creencias de base gnóstica, tal como hemos mencionado en los párrafos anteriores, y de desarrollo amplio.
- Una concepción del cristianismo entendido como una religión exotérica destinada a las multitudes de fácil conformar espiritual y con una realidad oculta esotérica— que sería, en buena medida, común a otras grandes religiones.
- La creencia en la reencarnación.
- La práctica de la alquimia, ya entendida en un sentido psicológico o espiritual o en su sentido físico tradicional.
- Un cultivo de la astrología.
- La práctica de diversas técnicas de autoayuda.
- Una concepción panteísta.
- Negación del carácter religioso de sus organizaciones (salvo excepciones), político o lucrativo.
- La adquisición del conocimiento rosacruz mediante estudios, por correspondencia, y la participación en ceremonias iniciáticas estructuradas en grados de superación sucesiva y de forma casi automática.
- La existencia, en el origen de cada orden, de un fundador carismático, privilegiado intermediario entre una elite humana y los planos o seres superiores de los que procede el verdadero conocimiento.
Su relación con la masonería.
En el periplo de los rosacruces, su relación con la masonería ocupa un espacio importante. Así, por ejemplo, en la versión de su historia proporcionada por la más numerosa y extendida de sus organizaciones en la actualidad, AMORC, "la masonería no sería sino la organización nacida de Salomón, un rosacruz que no llegó a ser iniciado por completo"; versión no aceptada, evidentemente, por la masonería, y que carece de cualquier base histórica.
Jean Pierre Bayard en su libro La meta secreta de los rosacruces (Robin Book, Barcelona, 1991), asegura que "Los Manifiestos de la Rosacruz, creados o no por Andreae y sus amigos, han tenido una influencia espiritual sobre muchos grupos y, particularmente, sobre los de Inglaterra. Francis Bacon, con la Nova Atlantis, influenció y marcó las logias masónicas". Afirma, por otra parte, que "Johann Gotthier, al publicar en 1804 su libro sobre los rosacruces, pensó que francmasones y rosacruces no eran sino un único grupo en su origen, que se separaron para propagar por una parte ideas filosóficas y filantrópicas en la masonería y, por otra parte, entre los rosacruces, para llevar a cabo investigaciones cabalísticas y alquímicas". Y, más adelante, describe el ambiente intelectual en el que todo ello pudo producirse, pues "Igualmente hemos visto que el Siglo de las Luces se sintió atraído por el iluminismo y que aquellos focos permitieron la eclosión de la francmasonería, bien estructurada desde 1717. Esta orden no pudo sino permanecer atenta a toda creación de sociedades análogas y seguir la evolución de los círculos, atribuyendo siempre a la Rosacruz de Oro intenciones alquímicas". Unos párrafos que consideramos, más allá de anécdotas, como sumamente aclaratorios.
Los autores especializados en estas materias, como el arriba citado, enumeran y relatan numerosos círculos de inspiración rosacruz que adoptaron, desde principios del siglo XVIII, organización y ritos masónicos, tanto en Alemania, Rusia, Inglaterra, etc.
Es importante observar que el grado 18 del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, practicado en la mayoría de logias masónicas de todo el mundo, se denomina Gran Príncipe Rosa Cruz. En este grado se recogen diversos símbolos indudablemente rosacruces: el triple beso, el pelícano, el águila, barras de cera para lacrar&
La S.R.I.A. está compuesta exclusivamente, ya lo veíamos anteriormente, por masones, que conciben la "vía rosacruz" como una profundización más espiritual, incluso superior, en algunos aspectos, a la experimentada en la propia masonería.
En el caso concreto de la Orden Rosacruz, cuya sede mundial está en Las Palmas de Gran Canaria, los mandiles, de apariencia masónica a simple vista, la denominación de sus locales, "logias", y las referencias al Gran o supremo Arquitecto del Universo; nos remiten, inevitablemente, a la masonería como inspiradora tanto formal como materialmente o, al menos, formando parte de un tronco común.
Manuel Guerra, en su extraordinario Diccionario enciclopédico de las sectas (BAC, Madrid, 1999,2ª edición) asegura que "Los grados de iniciación, el secreto, etc. del rosacrucismo deben atribuirse probablemente a influjo de la masonería".
Cuando algunas organizaciones rosacruces analizan sus diferencias con otras entidades igualmente denominadas, denuncian la mayor o menor influencia ejercida por la masonería en ellas. Es el caso de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel que, para diferenciarse de AMORC, recurre a la inspiración masónica de ésta última, cuando afirma que en ella el proceso de la iniciación reviste carácter masónico: se realiza en una logia, asisten oficiales de ceremonia, se sigue un ritual preciso, se emplean palabras de pase, se utilizan signos e instrucciones secretas& Por el contrario, los seguidores de Max Heindel experimentarían una iniciación personal, espiritual e íntima.
Pero donde puede encontrarse una gran fuente de inspiración para alguna de las actuales órdenes rosacruces, particularmente AMORC, es en la nebulosa masonería llamada egipcia, es decir, la seguidora de los ritos de Menfis, Misraim y Menfis-Misraim.
Dicha masonería irregular no goza de buenas relaciones con las masonerías mayoritarias (la regular y la liberal), que la consideran como de carácter periférico e incluso "paramasónico". Históricamente llegó a contar con un gran desarrollo y extensión (también en España), pero a finales del siglo XIX sufrió una grave crisis de la que no se ha repuesto. En la actualidad se encuentra fraccionada en múltiples obediencias y "logias salvajes", con muy pocos seguidores en general, sufriendo periódicamente diversas "restauraciones" y escisiones. Precisamente de algunas entidades integrantes de la masonería egipcia, Spencer Lewis, fundador de AMORC, recibió algunas de las más importantes dignidades esotéricas que afirma llegó a poseer. Así, obtuvo del Gran Hierofante Teodor Reuss, en 1921, los más altos grados en la masonería egipcia: en el Rito Escocés Antiguo y Primitivo (grado 33), en el Rito de Menphis (grado 90) y en el Rito de Misraim (grado 95). El fundador de AMORC, en su artículo titulado "Misticismo verdadero", reproducido en la revista internacional de dicha orden, "El Rosacruz" de enero de 1950, asegura que: "Los Rosacruces (AMORC), como descendientes de los Esenios, que formaron parte de la escuela secreta cristiana, son probablemente los únicos que conservan e imparten la mayoría de esos secretos cristianos, ayudados por las actividades secretas de una o dos organizaciones semejantes, como la de los Caballeros del Temple en Europa y los Hermanos del Traje Blanco, que pertenecen a los antiguos Ritos de Memphis y Misraim". Un texto de dudosa calidad literaria, impreciso en su terminología, pero que establece unas clarificadoras filiaciones.
AMORC, en su texto Preguntas y respuestas rosacruces, afirma, además, que "En el siglo XVIII, la Orden de la Rosa-Cruz y la Francmasonería estaban muy relacionadas, lo que explica por qué uno de los más altos grados de la masonería lleva el nombre de Caballero Rosa-Cruz´. Estas dos organizaciones son totalmente independientes entre sí, y por tanto, sus actividades también lo son. Ciertamente, hay numerosas personas que son al mismo tiempo rosacruces y masones, demostrando que no existen incompatibilidades entre estos dos movimientos".
Intentemos, como resumen, establecer algunas semejanzas y diferencias entre ambas corrientes, ya aclarado que el "humus" humano e intelectual eran comunes.
- Semejanzas: ambas son órdenes (organizaciones jerarquizadas y estructuradas en grados); son entidades iniciáticas (se pasa de un grado a otro superior mediante ceremonias iniciáticas); son grupos esotéricos (para una minoría, frente a las religiones exotéricas, propias de las mayorías); afirman remontarse a una remota antigüedad; poseen sistemas de signos, toques y palabras; realizan sus trabajos en logias dirigidas por venerables maestros; emplean mandiles; comparten numerosos principios filosóficos.
- Diferencias: la masonería posee tres grados fundamentales (aprendiz, compañero y maestro), mientras que la rosacruz no los tiene; los sistemas de enseñanza son distintos (en la masonería es simbólica, en la rosacruz se realiza a través de monografías periódicas); en la rosacruz se escucha el discurso del maestro y se retiran, y en las tenidas masónicas, los asistentes exponen sus opiniones; en la rosacruz el ascenso de grado es automático, mientras que en la masonería el aspirante debe acreditar su preparación; el mandil rosacruz es triangular, por el contrario, en la masonería es cuadrangular; la masonería está enfocada a la simbología y la reflexión filosófica y social, y la rosacruz se encamina al desarrollo de las potencialidades de la persona, la alquimia y la astrología.
Su relación con el cristianismo.
Todos los grupos rosacruces consideran a Jesucristo, al menos, como uno de los más grandes "iniciados" y maestros, afirmando alguna obediencia concreta (caso de Lectorium) que ha sido el mayor de todos ellos. Aseguran que sería la encarnación de seres superiores enviados a la humanidad para rescatarla de su desvío. Sin embargo, esa inicial visión amable de Jesucristo, absolutamente incompatible con la fe cristiana, conviene analizarla más de cerca. Inmediatamente, cualquiera de estos grupos incurre en uno de estos de dos juicios:
- Su doctrina no fue entendida mas que por un puñado de "iniciados", quiénes la transmitieron de forma oculta a través de diversas organizaciones secretas (gnósticos, maniqueos, templarios, rosacruces). Es el caso de la Fraternidad Rosacruz de Max Heindel y también, con matices, de Lectorium Rosicrucianum, que propugnan ser el "verdadero cristianismo".
- Hay que rescatar al verdadero Jesucristo, quien, a su juicio, sólo sería uno más de los grandes iniciados de todos los tiempos, incluso un "ser" procedente de otra dimensión con una compleja misión sólo transmitida a unos pocos privilegiados; mientras que millones de personas se han conformado con una religión distorsionada y esclavizante. Es el caso de AMORC y otros grupos.
Ambas posiciones reducen a Jesucristo a una mera abstracción, a una idea preconcebida accesible a unos pocos. Y ello, cuando no le se reduce a la categoría de los "grandes maestros", ignorándose su filiación divina absolutamente original e inimaginable. Ambas posturas no pueden compatibilizarse, de manera alguna, con el Cristo de la Iglesia católica, que nos asegura puede transformar a cualquier hombre independientemente de su condición, formación y temperamento.
Posición de la Iglesia católica ante los grupos rosacruces.
Los rosacruces han preocupado especialmente a la Iglesia católica hispanoamericana, en cuyo territorio tales grupos han arraigado con especial intensidad, siendo el libro del CELAM Las sectas en América Latina (Editorial Claretiana, Buenos Aires, 1986) uno de los primeros textos católicos que le dedican un importante espacio crítico.
Por lo que respecta a textos y documentos oficiales de la jerarquía católica, o de otros organismos oficiales, pocos son los que, de forma expresa, mencionan a las órdenes rosacruces, analizando el contenido de sus doctrinas. Nosotros conocemos dos magníficos textos.
El primero de ellos es la Instrucción Pastoral, de noviembre de 1991, del Arzobispo de Miami, sobre el movimiento de la "Nueva Era". Veamos, brevemente, su estructura y orientación. Después de explicar el sentido y contenidos de este movimiento, determina la radical incompatibilidad entre el mismo y la Iglesia, mencionando a los rosacruces dentro de su apéndice, donde relaciona conceptos, temas, intereses y organizaciones integrantes de este amplio movimiento sincrético y multiforme.
Posteriormente será el Arzobispo Primado de Méjico, Norberto Rivera Carrera, quien elaboró en 1996 una Instrucción Pastoral dedicada al estudio de la misma corriente, figurando en la misma los rosacruces como uno de los grupos precursores. Por ello, vamos a reproducir y resumir las líneas maestras de este esclarecedor documento, amplio, muy bien estructurado, escrito con lenguaje claro, atractivo y preciso, lo que no impide afrontar los retos planteados por la "new age" (Nueva Era, en español), llegando a reconocer algunos errores cometidos en el seno de la misma Iglesia ante estas asociaciones y corrientes.
El autor considera que nos situamos ante una "ola cultural/filosófica/religiosa" formada hace unos 35 años y que ha hecho sentir sus efectos en todos los aspectos de nuestras vidas. Se trataría, a su juicio, de un intento vano del hombre por salvarse a sí mismo, expresión de la nostalgia de una presunta "edad dorada" de la humanidad acrecentada por cierto espíritu milenarista. Para la "new age" el universo entero sería un todo vivo del que nosotros formaríamos parte.
Varios factores habrían facilitado tan rápida difusión: el proceso de globalización en los diversos campos del actuar humano, la agresiva comercialización de todos los aspectos de la vida del hombre de hoy, el destierro de la fe del horizonte del saber humano y, por último, la insaciable sed del hombre de una trascendencia y de la necesidad de sentido.
La "new age" no es una organización única, sino una misma mentalidad dotada de una enorme capacidad de comunicación muy fluida. Sin embargo, pese a la aparente multiformidad de las innumerables expresiones de esta corriente, compartirían una serie de creencias básicas:
- El ecologismo que, en su versión "profunda", niega la diferencia de fondo entre la existencia humana y la no humana.
- El panteísmo. En parte derivado del anterior, se crea una especie de espiritualidad planetaria, perdiendo la noción de un Dios personal en favor de una fuerza divina que estaría presente en todo.
- El gnosticismo, también presente en todas las grandes tradiciones religiosas, sería expresión de la tendencia a exaltar a la razón humana, atribuyéndole poderes extraordinarios. En el caso del cristianismo, el gnosticismo pretendía que en la Sagrada Escritura existiría un mensaje escondido que sólo ciertas mentes iluminadas podrían descifrar. Múltiples agrupaciones encarnarían hoy día esta tendencia: la Sociedad Teosófica de Helena Blavatsky, la Antroposofía, la Gran Fraternidad Universal, las órdenes rosacruces, Nueva Acrópolis, etc. A juicio del autor, por lo tanto, las órdenes rosacruces se situarían entre las precursoras ideológicas de la "new age", siendo todavía promotoras expresas de la misma. La masonería, con sus ritos, símbolos y ceremonias, también estaría muy relacionada de fondo con la gnosis. Todas estas corrientes, además, pretenden potenciar la voluntad y la capacidad humanas merced a supuestas fuerzas cósmicas secretas de las que serían celosas depositarias.
- La pseudo-ciencia. Esta corriente se afana por comprobar sus ideas y sus técnicas de forma presuntamente científica. Por ejemplo, pretenden borrar la frontera entre materia y espíritu, entre vida biológica y consciencia humana.
La Instrucción Pastoral continúa afirmando la incompatibilidad de la "new age" con el Evangelio, al ser la característica común más preocupante de esta corriente el relativismo religioso, espiritual y moral. Para la "new age" el hombre forma parte de un ser cósmico único que está en evolución hacia la perfecta conciencia de sí. La conciencia humana no sería sino el penúltimo estado evolutivo de la revelación de esa conciencia cósmica, siendo su destino el disolverse en el anonimato del ser. En este marco, muchos serían los "mesías" y "maestros aparecidos. Por lo tanto, la revelación de Dios en Jesucristo pierde su carácter singular.
Una de las ideas básicas de la "new age", plenamente compartida por las diversas obediencias rosacruces, es la de la reencarnación, creencia totalmente irreconocible con la fe cristiana, siendo inconciliable con la revelación cristiana:
"Si ése fuera el caso, Cristo habría tenido que morir muchas veces desde la creación del mundo. Pero el hecho es que ahora, en el final de los tiempos, Cristo ha aparecido una sola vez y para siempre, ofreciéndose a sí mismo en sacrificio para quitar el pecado. Y así como todos han de morir una sola vez y después vendrá el juicio, también Cristo ha sido ofrecido en sacrificio una sola vez para quitar los pecados de muchos" (Heb. 9, 26-28).
El texto insiste en otros aspectos, particularmente cuando los promotores de la "new age" afirman la compatibilidad de su espiritualidad con la doctrina y fe católicas. El autor de la Instrucción hace propias unas palabras de Juan Pablo II escritas en su libro Cruzando el umbral de la esperanza, quien afirma que "la "new age" no puede llevar a una renovación de la religión, pues sólo es un nuevo modo de practicar la gnosis".
Vamos a reproducir literalmente, por último, los elementos de la "new age" que, a modo de síntesis, ofrece el autor como más disconformes con el catolicismo y que, en mayor o menor medida, están presentes en las doctrinas y prácticas rosacruces:
"A. Despersonaliza al Dios de la revelación cristiana.
B. Desfigura la persona de Jesucristo, desvirtúa su misión y ridiculiza su sacrificio redentor.
C. Niega el evento irrepetible de su Resurrección por la doctrina de la reencarnación.
D. Vacía de su contenido a los conceptos cristianos de la creación y de la salvación.
E. Rechaza la autoridad magisterial de la Iglesia y su forma institucional.
F. Relativiza el contenido original, único e históricamente fundado del Evangelio.
G. Deforma el lenguaje, dando un nuevo sentido a términos bíblicos y cristianos.
H. Se apoya falsamente en los místicos cristianos y trastorna el sentido de sus escritos.
I. Diluye irremediablemente la práctica de la oración cristiana.
J. Descarta la responsabilidad moral de la persona humana y niega la existencia del pecado.
K. Desorienta a los niños y a los jóvenes en su formación religiosa.
L. Divide y explota económicamente a las familias cristianas".
Conclusiones.
La existencia, creencias y prácticas de estas organizaciones generan, ciertamente, escaso interés en el gran público, al contrario que en el reducido grupo de seguidores incondicionales empeñados en una práctica ascética muy marcada en algunos casos y en un voluntarismo agotador que puede derivar en profundas decepciones. Por ello, la presencia de personajes de lenguaje oscuro, de comportamiento excéntrico y de fantasiosos logros y cualidades, es una constante en buena parte de los grupos antes descritos. Entre estos entusiastas del lenguaje críptico y de retorcidos simbolismos, no es infrecuente que la progresiva pérdida de contacto con la realidad desemboque en problemáticas personales que limitan con lo patológico.
Pero su influencia es mayor de la aparente. Buena parte de los temas desarrollados desde la llamada "New Age" en múltiples foros, así como muchas de sus creencias y prácticas, que tanto están calando hoy día especialmente entre los jóvenes, fueron propugnadas, en su día, por los precursores de estas entidades. Por ello no está descaminado el afirmar que una parte relevante de la moderna "New Age" es tributaria del esfuerzo de los modernos rosacruces, vulgarizando una concepción de la vida derivada de sus creencias y prácticas, siendo comunes en todo caso una serie de constantes: relativismo religioso, concepción pseudoespiritual de la existencia humana, práctica de determinadas "ciencias paranormales" y disciplinas esotéricas (quiromancia, simbolismo, técnicas de relajación, etc.), general creencia en la reencarnación, una base filosófica gnóstica, etc.
Es incuestionable, por todo ello, que las doctrinas de la "new age" y de los rosacruces, pioneros e impulsores, junto a otros muchos, de la misma, así como sus prácticas, son inconciliables con una pertenencia y una identidad netamente católicas.
Asumir unos principios excluye otros. Y aunque no exista una condena canónica expresa, como ocurrió en el caso de la masonería, es indudable que, pese a que las diversas obediencias rosacruces niegan tener un carácter religioso, sus principios son incompatibles. Una cosa no puede ser a la vez otra cosa distinta. No se puede creer que Jesucristo es Dios encarnado entre nosotros y, simultáneamente, que sólo sea uno más de los "grandes maestros de la humanidad". No se puede creer en la reencarnación, y en la vida después de la muerte tal como nos enseña la Iglesia católica. El Evangelio es para todos los hombres o sólo un código cifrado para unos pocos.
Nos encontramos, por tanto, en una circunstancia ante la que no podemos ser indiferentes, que exige seriedad para afrontar la verdad de la propia vida. Cristo es la verdad encarnada del Padre y la Iglesia la posibilidad de encuentro y de una vida más humana para todos los hombres, sin que su condición o temperamento sean barrera para ello. Y ello es verdad también para mí, o nos entregamos a ilusorias empresas de búsqueda de mensajes, progresivamente oscuros y restringidos, que sólo pueden acarrear la mentira con el rechazo de la realidad.
No pretendemos crear polémica por mero gusto, sino aclarar conceptos y realidades, proporcionando elementos de juicio que permitan afrontar la confusión que presentan estas entidades a muchas personas atraídas por esas corrientes pseudoespirituales de moda.
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