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El catolicismo light no reforma la Iglesia
El autor de la biografía oficial de Juan Pablo II «Testigo de Esperanza», George Weigel, acaba de publicar en Estados Unidos un libro sobre las causas que han provocado la grave crisis que padece la Iglesia católica en Estados Unidos tras destaparse los casos de abusos sexuales y homosexualidad de una parte del clero. «El coraje de ser católico» es el título del libro que aparecerá en España próximamente, editado por Planeta+Testimonio. «La actual crisis está causada por una insuficiencia de santos», dice Weigel.
George Weigel, autor de la biografía oficial de Juan Pablo II «Testigos de Esperanza», y del reciente libro «El coraje de ser católico», contesta en esta entrevista a las causas que ha provocado la grave crisis que padece la Iglesia en Estados Unidos.
- ¿Hace falta coraje para ser católico hoy en día en EE UU?
- Elegí el título «El Coraje de ser católico» porque ésta es la forma en que siempre tiene lugar la genuina reforma dentro de la Iglesia - a través de hombres y mujeres de convicción y coraje, capaces de estar hacer frente a la cultura dominante, de ser genuinos e íntegros, felices de ser católicos - . El «catolicismo light» nunca han reformado la Iglesia. La reforma siempre implica una apropiación más profunda y más cuidadosa de las verdades que Cristo confió a la Iglesia - las verdades que son, si quieres, su «constitución» - .
Ortodoxia, la solución
- ¿Y eso requiere coraje?
- Ya lo creo. Pero al mismo tiempo es algo consolador. Una de las cosas que necesitan los católicos es recuperar el sentido de la gran aventura que significa la ortodoxia. La ortodoxia cristiana es la propuesta más excitante que se ofrece en el mundo de hoy. Es con diferencia más excitante que conformarse con ser «católico light».
- ¿Qué significa «catolicismo light»?
- No podemos entender la crisis del abuso sexual del clero y la falta de liderazgo episcopal fuera del contexto de las pasadas tres décadas y media. Durante ese periodo, una cultura de disensión echó raíces en la Iglesia en Estados Unidos. Y, por «cultura de disensión» no entiendo simplemente a los hombres y mujeres que se encuentran confundidos, o el hecho de que la Iglesia debería expresar sus enseñanzas de una manera más clara. Por «cultura de disensión» entiendo a los hombres y mujeres - incluyendo sacerdotes, religiosos y religiosas, obispos, teólogos, catequistas, burócratas eclesiales, y activistas - que han creído que lo que la Iglesia proponía como verdadero era falso para el día de hoy. Si realmente piensas y crees que la más alta autoridad de la Iglesia enseña falsedades y está conduciendo a la Iglesia hacia el error, no estás en plena comunión con la Iglesia. Y esto tiene consecuencias en todo, incluso en el comportamiento.
Catolicismo light
- ¿Está usted sugiriendo que la «cultura de la disensión» es la principal responsable de la actual crisis en su país?
- La «cultura de la disensión» no lo explica todo en la crisis católica del año 2002. Es una parte importante del puzzle, aunque hay que tener en cuenta que lo que la gente piensa tiene mucho que ver en su comportamiento.
¿No le parece lógico que algunos hombres que han llevado una vida de decepción y engaño intelectual en el seminario - hombres a los que se les dijo que tenían que dejar atrás la enseñanza de la Iglesia - hayan llevado también en ocasiones vidas de engaño en su comportamiento, llegando al abuso sexual? Esto no nos debería sorprender, dada nuestra cultura saturada de sexo.
¿No le parece lógico que los obispos que eran reticentes a fijar lo que estaba manifiestamente mal en los seminarios y universidades católicas en los años setenta y ochenta - en parte, porque eran reticentes a enfrentarse a la «cultura de la disensión» - no han sido capaces después de poner remedio al escándalo de los abusos sexuales del clero? No debería sorprender.
Falta de fidelidad
- ¿Cómo describiría la crisis en sí?
- La crisis tiene tres partes. Por una parte está la crisis del abuso sexual del clero, cuya forma más frecuente es el abuso homosexual de adolescentes y jóvenes. Luego está la crisis de la falta de liderazgo episcopal. Y, en el fondo de todo, está la crisis de ser cristianos. Los sacerdotes que abusan sexualmente y los obispos tímidos y débiles son, primera y principalmente, discípulos cristianos inadecuadamente convertidos. Es por esto que la crisis pide a todos en la Iglesia que vivan sus vidas como cristianos de una manera más radical.
Como el padre Richard Neuhaus y otros han defendido durante meses, la primera respuesta a una crisis de infidelidad es la fidelidad. Zenit «La confusión sobre la crisis no llevan al camino de la genuina reforma católica. Ésta no es una crisis del celibato; ésta es una crisis de hombres que han fallado en la vivencia de las promesas de celibato que pronunciaron ante Cristo y la Iglesia. No es una crisis causada por la ética sexual de la Iglesia, que condena totalmente cualquier forma de abuso sexual. No es una crisis causada por el «autoritarismo», porque la Iglesia no es una institución autoritaria - es una comunidad formada por una tradición con autoridad - . Y no es una crisis creada por los medios. Sí, los medios han distorsionado las cosas y han creado una atmósfera de frenesí; pero este frenesí necesita algo de qué alimentarse. Es un error no darse cuenta de que ésta es una crisis que han creado los católicos y que sólo los católicos pueden evaluar».
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