conoZe.com » Ciencia y Fe » Persona » Libertad de expresión, libertad de conciencia

Libres de prejuicios

Una gran amiga, de 12 años, me envía un correo, en el que me advierte que es tipo cadena pero muy bueno. Como me parece interesante, lo copio: «Se va a elegir a un nuevo líder mundial, tú tienes la oportunidad de votar por él. Hay 3 candidatos, a continuación te presento algunos hechos conocidos en la vida de los mismos: Candidato 1: Ha sido asociado con políticos corruptos. Consulta a varios astrólogos. Tuvo 2 amantes. A una de ellas la golpeaba. Fuma y toma entre 8 y 10 martinis al día. Candidato 2: Ha sido despedido en 2 ocasiones de su trabajo. Duerme hasta el mediodía. Consumía opio en la universidad y todas las noches se toma una botella de whisky. Padece de obesidad y es conocido por su mal temperamento y agresividad. Candidato 3: Es un héroe de guerra condecorado, es vegetariano, no fuma y toma cerveza ocasionalmente. No se le conocen relaciones extramaritales. Respeta a las mujeres. Ama a los animales, muy reservado. ¿Por cuál de los 3 candidatos votarías? Piensa detenidamente. Elige tu respuesta...

El candidato 1 es: Franklin D. Roosevelt. El candidato 2 es: Winston Churchill. El candidato 3 es: Adolph Hitler.

Piensa antes de juzgar a alguien Rocío, que así se llama la chica, termina: «Interesante, ¿no crees?» Me alegra que la gente joven tenga capacidad de crítica frente a estereotipos y prejuicios basados en lo que todo el mundo dice o piensa. Sin embargo, ésta, actitud propia de la juventud, mantenida a lo largo del tiempo es una de las que nos permite ser siempre jóvenes.

Hay muchas cotas de poder interesadas en que no ejercitemos el sentido crítico. Estamos asistiendo al espectáculo de las afirmaciones que no tienen ninguna argumentación que las sostenga, de promesas, que se da por supuesto que no se van a cumplir, de insultos que pretenden que apoyemos la descalificación canalla del prójimo. Es fuerte la presión para que nos movamos sólo por prejuicios. En muchos ambientes de la vida social lo único que parece interesar es hacerse con nuestro dinero, o, lo que es peor, con nuestro sometimiento a sus postulados.

El colmo de la manipulación es pretender convencernos de que todos los que actúan en la vida social se comportan del mismo modo, y que por tanto no vale la pena ejercitar el sentido crítico. Tan sólo seguir al que dé más beneficios.

Las personas somos libres, no sólo porque no se nos encarcela, sino sobre todo porque se nos trata de acuerdo con lo que somos. Por tanto sólo el hecho de pretender comprar nuestra libertad ya constituye una importante agresión a nuestra dignidad. Quien nos trata para que hagamos lo que él dice, pero sin darnos argumentos para nuestra inteligencia, ataca nuestra libertad. Quien es investido de autoridad, pero después no se hace responsable de los efectos de sus decisiones, agrede nuestra dignidad.

Seguramente sería interesante bajar el nivel de excitación de las pasiones humanas: la descalificación de los otros, la justificación de la violencia —física o verbal— contra los «legítimamente distintos», el fomento de las actitudes egoístas con la exacerbación del nosotros frente a ellos. En cambio podría subirse el nivel de argumentación, de olvido de tópicos y etiquetas, y de asumir responsablemente la eficacia o no de las propias actuaciones.

Nuestra sociedad tiene importantes problemas: inmigración, educación, participación social, enfermos, excluidos de los bienes y de la cultura, violencia en muchos ambientes, crisis familiares, desigualdad en las relaciones laborales, falta de sentido en la vida. Si queremos tener futuro parece que la acción social tiene que dedicarse a estudiar con realismo estos problemas, a ofrecer soluciones inteligentes y creativas, y a convocar para que todos trabajemos en ellas.

Por otra parte no es sólo una cuestión de los líderes —políticos, sociales o religiosos— que tenemos, sino de cómo estamos dispuestos a exigirles que sean. Todos los días podemos muchas veces hacer el esfuerzo de ejercitar el sentido crítico y decir «no» a los prejuicios en los que estamos inmersos.

Ahora en...

About Us (Quienes somos) | Contacta con nosotros | Site Map | RSS | Buscar | Privacidad | Blogs | Access Keys
última actualización del documento http://www.conoze.com/doc.php?doc=8080 el 2008-02-13 22:52:21