» bibel » Documentos » Juan Pablo II » Exhortaciones Apostólicas de Juan Pablo II » Ecclesia in Africa » Capítulo II.- La Iglesia en África
III.- Formación de los agentes de la evangelización
53. Con qué recursos la Iglesia en África logrará superar los desafíos apenas mencionados? «El más importante, después de la gracia de Cristo, es el pueblo. El Pueblo de Dios —entendido en el sentido teológico de la Lumen gentium, un pueblo que abarca a los miembros del Cuerpo de Cristo en su totalidad— ha recibido el mandato, que es al mismo tiempo un honor y un deber, de proclamar el mensaje evangélico (...). Es preciso preparar, motivar y fortalecer a toda la comunidad para la evangelización, a cada uno según su función específica dentro de la Iglesia».67 Por esto, el Sínodo ha puesto fuertemente el acento en la formación de los agentes de la evangelización en África. Ya he recordado la necesidad de la formación apropiada de los candidatos al sacerdocio y de quienes son llamados a la vida consagrada. La Asamblea ha prestado igualmente debida atención a la formación de los fieles laicos, reconociendo su papel insustituible en la evangelización de África. En particular, se ha puesto justamente el acento en la formación de los catequistas laicos.
54. Se impone una última pregunta: la Iglesia en África ha formado suficientemente a los laicos para que asuman con competencia sus responsabilidades civiles y consideren los problemas de orden sociopolítico a la luz del Evangelio y de la fe en Dios? Esto es seguramente un cometido que interpela a los cristianos: ejercer en el tejido social un influjo dirigido a transformar no solamente las mentalidades, sino las mismas estructuras de la sociedad, de modo que se reflejen mejor los designios de Dios sobre la familia humana. Precisamente por esto he propuesto para los laicos una formación completa que les ayude a llevar una vida plenamente coherente. La fe, la esperanza y la caridad no pueden dejar de orientar el comportamiento del auténtico discípulo de Cristo en cualquier actividad, situación y responsabilidad. Puesto que «evangelizar significa para la Iglesia llevar la Buena Nueva a todos los ambientes de la humanidad y, con su influjo, transformar desde dentro, renovar a la misma humanidad»,68 los cristianos deben ser formados para que vivan las exigencias sociales del Evangelio, de modo que su testimonio se convierta en un desafío profético ante todo lo que perjudica el verdadero bien de los hombres y de las mujeres de África, como de cualquier otro continente.
Del director
- Islandia: primer país sin nacimientos Síndrome de Down, el 100% son abortados
- 9 cosas que conviene saber sobre el Miércoles de Ceniza
- Juan Claudio Sanahuja, in memoriam
- Trumpazo: la mayoría de los católicos USA votaron por Trump (7 puntos de diferencia)
- Mons. Chaput recuerda y reitera en su diócesis la necesidad de vivir la castidad a los divorciados que se acerquen a la Confesión y la Eucaristía
- Cardenal Sarah, prefecto para el Culto Divino, sugiere celebrar cara a Dios a partir de Adviento
- Medjugorje: Administrador Apostólico Especial. Por ahora no parece.
- Turbas chavistas vejan y humillan a seminaristas menores